Lita de Lazzari
31 enero, 2013Rescatando del olvido otra sección amiga: un-dos-tres-ya. Cosas ricas que se preparan en un suspiro, que son fáciles y que apenas mordés pensás: ¿¿porqué no como esto todos los días??
Tapas batatas, o snack vegano con alternativas para demás tribus.
Con lo que había en la heladera:
– la base, a modo de bruschetta, discos de batata. Si tenés ganas los podés dorar apenas por abajo en una plancha mientras armás el resto. Salpimentar.
– fetas de tofu semiduro, finitas. Si no vas a cocinarlo, al tofu hay que darle cariño para que sea rico: salpimenté, y además me animé con una untadita suave de wasabi y gomasio (para los criollos, sésamo tostado y listo).
– rociadita de aceite de oliva.
Eso es todo, amigos. Inspirado muy libremente en un queso y dulce, si se quiere: con mucha licencia poética, lo sé. La clave de todo esto es que la batata (camote para el resto del continente) esté bien dulce, bien rica y húmeda. Si no es así usala para otra cosa, acá es la vedette de la película.
Lo del wasabi fue un atrevimiento, pero me gustó mucho. Nota mental: wasabi + tofu, seguiremos investigando.
- Versión no vegana y también comprobada: en lugar de tofu, queso feta de cabra. Ge-nial. Unas gotas de miel también levantan muchísimo.
- Versión carnívora empedernida: siii gordingui. ponele un rulito de jamón crudo, entre la batata y el queso de cabra. En este caso, no agregues sal y lo de “rulito” no es una forma de decir: el sabor va a sentirse mucho mejor si el jamón está dispuesto con relieve. La feta aplastada, no va.



