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Kalinti (fainá marroquí)
18 enero, 2013Lita de Lazzari
31 enero, 2013Estoy empezando a notar una fiebre del garbanzo en los últimos tiempos…
Entre el hummus, la fainá marroquí, las crepes de harina de garbanzos, y ahora un nuevo invento, digamos que hay un creciente fanatismo por esta legumbre, agravado por su uso intensivo en Marruecos para las sopas, las tagines y los cous cous.
Está bien, se lo merece. ¿Cuántos ingredientes conocen que queden bien de tantas formas? Hechos puré, al horno, hervidos, transformados en harina, o solos: un diez en versatilidad.
Este snack no suena muy canchero que digamos. Cuando uno está pensando en la papita frita o los maníes salados, la idea de un garbanzo rostizado parece un poco ñoña. Pero basta tomar el primer puñadito para entender que no vas a parar hasta terminar la fuente. Esa es la prueba de fuego de cualquier snack, o no? cuando uno no puede dejar ni uno en el fondo del plato.
Los garbanzos horneados quedan crocantes y saladitos. Son muy fáciles y con una cerveza, satisfacción garantizada.
Ingredientes - garbanzos - aceite de oliva - limón - comino - salsa de soja - sal y pimienta - si tenés y te gusta: harissa o pimentón picante
Procedimiento:
1) Cocinar los garbanzos (una taza, dos si tenés invitados…) en agua con sal y laurel, hasta que estén bien hechos.
Comentario al paso: las legumbres NO son como las pastas o los cereales. No tienen que quedar al dente. Son más ricas y caen mejor bien cocidas. Para eso, por un lado, hay que remojarlas varias horas y hervirlas un buen tiempo, mínimo cuarenta minutos; por otro, no hay que arrebatarlas. El hervor fuerte rompe el grano o lo cocina desparejo.
2) Secarlos bien con un paño o dejarlos en una placa con bastante espacio entre sí, un rato largo.
3) Mezclar en un frasco: aceite de oliva, comino, sal, pimienta, unas gotas de salsa de soja y de jugo de limón. Agitar el frasco bien cerrado, y echar sobre los garbanzos. Remover. No tienen que quedar ensopados; es sólo un condimento y un poco de humectación para que no se vuelvan un cartón al re-cocinarlos.
4) Llevar a horno suave, unos veinticinco a treinta y cinco minutos; todo depende del horno, de la humedad ambiente y de los caprichos de la naturaleza. Hay que ir probando uno cada tanto, aprovechando para remover, hasta que estén dorados y bien crocantes por afuera.