6 mayo, 2012
30 mayo, 2012
Crema de rúcula… sin crema.
Pero con rúcula, y mucha. Un atado gigante, del tamaño de un peinado afro pasado por la ola verde. Ajo, aceite, sal y pimienta. Y mucha pero mucha minipymer, hasta que se produce la magia.
Es de esas ideas buenas para aprovechar la estación: cuando te dan tres x uno en la verdulería, y todos sabemos que la ensaladita de rúcula tiene un límite.
La ola está de fiesta…



