8 julio, 2012
24 julio, 2012
Ricuras dulces, reloaded.
Parecía que la fiebre de cupcakes, muffins y minitortas locas había llegado a su fin…
Neveeeeer.
Retroceder nunca, rendirse jamás. Volví a la carga apenas encontré una excusa a la altura de las circunstancias: un relleno de bananas y chocolate (con cacao de verdad, pelado, tostado y molido en casa, tomáááá).
Vamos derecho al grano, o mejor dicho a la pulpa del asunto, que el resto del asunto “hago-dulces-pero-no-amaso” ya está explicado en otros posts, los que linkeo más arriba. La receta del relleno, acá.



