Otra victoria para la sección “hacete amigo del tofu que no muerde”. Estos bastones al teryaki son una auténtica pavada, se hacen solos, doña. Es mejor preparar esto un domingo a la noche con fiaca, que ponerse a recalentar sobras, mirá lo que te digo.

Ni merece receta en página aparte, acá mismo cerramos trato:

– cortar el tofu en bastoncitos, más o menos como los de las fotos. Es importante usar tofu duro o semiduro, sino sería necesario rebozarlos. Igual, es el más fácil de conseguir.

– remojarlos (hablá bien querida: macerar, marinar, se dice) en salsa Teryaki. Si no tenés salsa teryaki, la hacés mezclando salsa de soja con azúcar o miel, en menos que canta un gallo. Asegurate de que se embeba bien por todos lados. Si lo podés dejar ensopado al menos veinte minutos, mejor.

– Precalentar una sartén con apenas aceite, y dorar los bastones por los cuatro lados. Cuando terminás el último lado, agregar el líquido que quedó de la macerada/marinada, y un poco más de agua para que no se ponga demasiado intenso al reducir.

Listo, te los comés, son geniales. Tofu y fuera…