Mousse de duraznos express

Fresquito, suave, dulce. Que sea un año así.

No se me ocurre mejor idea para empezar el 2015; basta de pan dulce y garrapiñadas, queridos latinoamericanos. Hace calor en nuestra parte del mundo, es hora de hacerle caso al verano y a la temporada de duraznos. Si encima tiene tres o cuatro ingredientes y mínimos segundos en la cocina, tanto mejor.

Esta receta es muy versátil. Por supuesto podés reemplazar el durazno por la fruta que prefieras; no te recomiendo ninguna demasiado acuosa ni las que se pelean con la gelatina: kiwi y ananá. A vos, soltero/a, te doy las cantidades para calcular por porción, ya que quizás la preparás para aprovechar alguna fruta sobrante en la heladera. Lo hacés antes de cenar, y tenés el postre justo a tiempo.

Ingredientes (por porción)

- 2 duraznos chicos o 1 grande.

- media cucharadita de agar-agar (o su equivalente en gelatina, aunque recomiendo mucho la opción saludable del agar-agar y se consigue en dietéticas fácilmente)

- 2/3 taza de leche (recomiendo mucho la leche de almendras para esta receta, pero se puede usar la que prefieras. Opción alternativa muy deliciosa: yogur. Otra opción muy distinta: leche de coco).

- 1 cucharada de azúcar mascabo. Puede ser stevia o miel en su reemplazo. Si los duraznos están maduros y ricos, podés usar menos.

- Opcionales: vainilla, canela, jengibre, arándanos frescos.

Procedimiento

Disolver el agar – agar en un poquito de leche o agua y reservar.

Pelar los duraznos y cortarlos groseramente en trozos. Llevarlos a una olla con la leche y el azúcar (y las especias si agregaste). Llevar a hervor y procesar con minipimer o licuadora. Agregar el agar-agar disuelto. Revolver a fuego medio unos minutos (3 a 5 está bien) y retirar del fuego.

Si querés, agregá arándanos frescos (o la fruta que te guste). Volcar la preparación en vasos o tazas y llevar a heladera: se enfría en media hora. Si no lo hacés en vasos, sino en un bowl más grande, demora un poco más, claro.