Fudge saludable: bocaditos «marroc» de chocolate

Con ésta pueden pasar dos cosas: que me adoren o que me internen. Me la juego…

Hace un tiempo compartí una receta pecaminosa al extremo. Era un fudge de chocolate, golosina gringa si las hay, una especie de bocadito o bombón de textura muy blanda que se pega a los dedos, untuoso y goloso. El fudge se hace con ingredientes obscenos que yo casi nunca uso: chocolate y más chocolate, crema o leche condensada, azúcar… hasta que llegó este experimento.

Basta de dar vueltas, vamos al grano. El 80% de este fudge son porotos negros. Frijolitos. Piénsenlo bien: untuosos, cremosos, ideales para el reemplazo saludable de toda la crema y el chocolate. Hermanado con cacao, manteca de maní y dátiles (ni siquiera usé azúcar!) y después de pasar un rato por el freezer, este falso fudge resultó ser un golazo. Quedó un pariente cercano del bocadito Marroc, un poco más blando y claro, bastante más livianito. Pero el sabor es un flor de copión, la verdad se parece muchísimo. Nadie tiene porqué saber que me comí la mitad sacando las fotos, no?

Las legumbres en los dulces no son un invento mío: los japoneses por ejemplo, usan aduki para casi todos sus postres y masitas. Yo sé que para el común de los mortales (al menos de este lado del mundo) es polémico, lo acepto. Más de uno ya me está enviando derecho al neuropsiquiátrico. Pero les sugiero que lo prueben antes de sentenciarme. En una de esas… se internan conmigo.

Ingredientes:

- una taza de porotos negros (frijoles) previamente remojados y cocidos a hervor suave, durante al menos una hora, con apenas sal.
- seis dátiles remojados en agua una noche.
Si no tenés dátiles o no querés gastar tanto dinero, podés reemplazarlos por miel, azúcar o stevia. Los dátiles son la versión más deliciosa y saludable pero sin ellos sale perfectamente y es súper rico igual.
- una cucharadita de canela
- una cucharadita de extracto de vainilla
- cuatro cucharadas soperas de cacao amargo bueno
- dos cucharadas de manteca de maní
- opcional: una cucharadita de miel. Los veganos pueden usar simplemente azúcar, agave o el endulzante que prefieran.
- opcional II: pasas de uva, nueces, etc.

Procedimiento

Procesar o minipimerear todos los ingredientes hasta que estén transformados en una crema pareja y lisa. Volcar en un molde o asadera forrado con papel film o manteca. Cubrir y llevar al freezer dos horas.

Cortar en cuadraditos y conservar en la parte más fría de la heladera, o en el freezer para comer helados (en ese caso sacarlos a temperatura ambiente veinte minutos o media hora antes de comer).

Opcional: incluir en la mezcla pasas de uva, o nueces tostadas y picadas por arriba, puede quedar muy bien.