Mezclar una taza de puré de batata, una de trigo sarraceno* y 150 de queso de cabra (que sea bue-no, y semiduro). Condimentar con sal, pimienta, canela, comino, un toque de azúcar y alguna hierba. Los de la foto, tienen además cebollas caramelizadas.
Hacer un puré lo más homogéneo posible y dorar al horno, primero fuerte para que se forme una costrita, después suave para que se sequen.
* El trigo sarraceno, llamado alforfón en otros lares, es para empezar un poco mentiroso: no es trigo. Es un cereal bastante desconocido, con un gusto diferente al que “hay que entrarle”, bastante proteico y lleno de ventajas para los vegetarianos. Se cocina en una proporción de dos de agua por una de sarraceno, por media hora. Parafraseando a un experto, el sarraceno es al cereal como el hígado a la carne. Lo dicho: hay que entrarle.
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