Tortilla crocante de mijo y calabaza
8 febrero, 2012Torta sin harina de batata y chocolate
9 febrero, 2012Crema de espinacas y tofu

Fácil, pero fácil fácil, eh.
Lavar un paquete de espinacas y quitarles los cabitos gruesos. Secar o dejar escurrir, dependiendo del grado de fiaca y de apuro.
Calentar una sartén grande al fuego hasta que humee. Es decir, que esté para pelar pollos. En ese momento, echar un chorrito de aceite de oliva, un diente de ajo aplastado o picado grueso (para que no se queme) y enseguida las espinacas enteras. Si la sartén es gruesa, se puede apagar el fuego apenas se agregan las espinacas y revolver para que se hagan parejas, con el calor acumulado. Esto para no achicharrar las pobres espinacas que son sensibles y, aunque no se van a quemar, pierden color y sabor al sobrecocinarlas.
Escurrir y procesarlas con unos 200 grs. de tofu. Si queremos una crema untable, usar tofu de seda; con el semiduro va a quedar una especie de ricota con espinacas, más granulada y más sequita. Condimentar con sal, pimienta, mucha nuez moscada y un toque de azúcar (o el dulce que use cada quien. Acá va un experimento exitoso pero que va a escandalizar a más de uno: la última vez, usé dos ciruelas pasas en para endulzar. Me animé porque la combinación de espinacas y ciruelas queda bien, entonces, por qué no…? la verdad es que salió perfecto, no se siente el sabor de la ciruela sino un dulzor más profundo pero suavecito, recomiendo).
Listo, c’est tout, that’s all folks. Con nueces picadas se acentúa el efecto “relleno de sorrentinos”. Para una tostada, en un canelón o hasta arriba de una papa al horno, satisfacción garantizada, éxito de tofu para principiantes.



