Mousse de Nutella

Diez, nueve, ocho… aroma a Nutella que te hace desmayar en el piso de la cocina. Siete, seis, cinco… ya lo preparaste (o debería decir, mezclaste tres ingredientes en una olla). Cuatro, tres, dos: lo acomodás bellamente en tacitas, vasitos, lo que haya a mano. Uno, cero… la parte más difícil de todo el asunto. Esperar un rato, a que se enfríe tu Mousse de Nutella en la heladera. Dramático, eh, durísimo. No tengo la receta para eso.

Esta mousse entra en la categoría cómo-no-lo-pensé-antes. No tiene mucha más ciencia que darle un complemento al Nutella para que sea cremoso, suavecito y liviano; y por si fuera poco, podés lograrlo vegano si hacés el nutella (o sea, la crema de avellanas y cacao) casero, como explico por aquí. En cualquiera de los dos casos, es imposible pifiarla: la delicia de postre que sale -en un plis plas- no tiene desperdicio.

Literalmente. No quedó ni una gota.

Ingredientes

-          1 taza de nutella (si hacés nutella casero, mejor, y entonces puede ser vegano también)
-          2 y ½ taza de leche (descremada o vegetal: pero recordá que la leche de soja industrial tiene azúcar, acá quedaría demasiado empalagosa. Mejor usá leches caseras de almendras, avena o delicia total: de coco)
-          1 cucharadita de café soluble (opcional, pero queda excelente, y no da sabor a café: solo equilibra el dulzor)
-          4 cucharaditas de kuzu, almidón de maíz o similar: que tenga acción espesante. Recomiendo el kuzu que es más saludable, se consigue en el barrio chino y en locales japoneses.
-          Opcionales: ralladura de naranjas, coco rallado, coco en escamas, avellanas tostadas, nueces picadas, almendras fileteadas o lo que se te ocurra.

Procedimiento

Disolver el kuzu o almidón en media taza de leche fría. Reservar. Mezclar en una ollita el nutella y el resto de la leche; integrar con batidor de alambre hasta disolver. Agregar el café soluble. Calentar la mezcla hasta punto de hervor y agregar la media taza de leche reservada anteriormente. Dejar hervir muy suavemente apenas un minuto y apagar el fuego. Llevar a temperatura ambiente: cada tanto hay que remover con el batidor para que no se forme una capa por arriba, pero apenas mezclás se disuelve nuevamente. Servir en tacitas o vasitos individuales y llevar a heladera por lo menos dos horas. Servir con el coco previamente tostado, nueces tostadas o lo que más te guste: frutillas, mascarpone batido…