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6 diciembre, 2013Tres personajes: coco rallado, huevos y azúcar integral. Una filmación express: cinco, diez minutos. Una post-producción básica: cuarenta minutos de horno suave. Un PELICULÓN: “budín de coco”, disponible ya en todas las salas.
Es increíble pero real. Este budín no tiene una pizca de harina, nada de lácteos. Si le agregué ingredientes es porque no puedo con mi genio: un poco de vainilla, un toque de canela, ralladura de limón. Y las ciruelas bombón para sentir una sorpresita intensa entre tanta esponja cocotera. La textura es inigualable, parece que estás comiendo coquitos transformados en nube. Me gustaría decir que tiene algún truquito, un golpe de muñeca que todo lo cambia, pero no hay secretos en esta receta. Simplemente juntás todo y lo metés al horno, a la que te criaste. Y funciona!
Ahora me malcopé y voy a investigar variantes de todo tipo; de hecho, la receta original era para un pan (salado) de coco, que me inspiró esta prueba. Pero vamos por partes. El de las fotos es éste, mi budín de coco casi instantáneo, y la receta dice así.
Ingredientes
(receta inspirada libremente en el pan salado de coco de Eleanor Ozich, “Petite Kitchen”).
- 3 tazas de coco rallado - 4 huevos y dos claras. Pueden ser 5 huevos enteros, también. - Unas cuatro cucharadas soperas de azúcar integral mascabo (ajustar a gusto) - Una cucharadita de polvo de hornear. Opcionales: Los que yo usé son: - Una cucharadita de canela, - Tres ciruelas bombón picadas, - Una cucharadita de extracto de vainilla Otros agregados que me suenan muy bien para probar: - Ralladura de limón (me olvidé pero estaba en mis planes iniciales!! Coco y limón, un solo corazón) - Nueces o almendras picadas - Tropezones de dulce de leche (así, a lo bestia, terminemos con esta ingenuidad: cucharaditas dispersas en la mezcla aquí y allá)
Procedimiento
En verdad cuesta creerlo, pero sencillamente se mezclan todos los ingredientes y se procesan un poco. Si los batís nada más, va a quedar con una textura un poco más rústica pero también va a salir bien. Yo preferí usar un poquito la minipimer porque, como todos saben, es mi mejor amiga. Eso es todo amigos. Mezclás y ya.
Volcar en un molde de budín apenas aceitado o enmantecado y hornear unos 40 minutos en horno precalentado a 160°, bien bajito.
Esperar que se temple un poco y desmoldar. Dejar que tome temperatura tibia o ambiente antes de cortar.
Si se prefiere una textura un poco más pareja y una miga más estructurada, se puede reemplazar media taza de coco por harina integral.
